Shampoo para pelo

Las mujeres muchas veces se quejan de todos los productos que deben comprar a diario para mantener su belleza interior, pero no son las únicas que sufren ante el aluvión de productos que el capitalismo amigo nos ofrece día a día.

Los hombres también tenemos problemas y nos angustiamos con ciertas cuestiones estilísticas (?). Y en lo personal, me pasa a la hora de comprar un shampoo.

Yo no se que marca es buena o mala, me guío por las publicidades o por el precio, como buen hijo de la televisión. Pero una vez que estoy frente a la góndola, no encuentro nada que se adapte a mi personalidad.

Tenés shampoo para rizos hidratados con naranjo en flor. Shampoo para pelo bajo en grasas trans con remolino del bosque. Shampoo para puntas caídas con dosificación de capuchino.

Yo sólo busco un shampoo para pelo. No pueden hacer uno que diga Shampoo para pelo. Ni siquiera digo "pelo común", porque vaya uno a saber lo que es lo común, pero algo normal, que no me maree. Shampoo para hombre, le podrían poner también, total a nosotros nos da lo mismo.

El problema es que tengo la fantasía que si me compro el shampoo para pelo lacio y tetas chicas, tengo miedo que ese mes me venga el período.

Resaltando lo que importa

¿Vieron esos apuntes de la facultad que ya te vienen subrayados de antes por otra persona?

¿No son lo más?

La Puerta

Cada hombre es un isla, no me vengan con que no, con que ningún hombre es una isla, porque sí, sí lo son. Y en cada uno rigen sus distintas reglas y costumbres, algunas compartidas y otras absolutamente desconocidas por otros.

Yo tengo un problema con aquellos que cierran la puerta del baño después de usarlo. Tengo tanto problema con eso que no sé por donde empezar. Y lo peor de todo es que este último tiempo estuve conviviendo con un amigo que necesita un lugar donde parar por una transición de vivienda, y él es de los que cierran la puerta mientras que yo no. Eso entre una de las mil locuras que me hace, que si no fuese mi amigo y leyese mi blog, ya me hubiese descargado por acá, pero no puedo así que lo hice en mi blog anónimo.

Resulta que yo soy de los que no cierran la puerta, entonces para mi ver la puerta del baño cerrada, significa algo tan simple como que está ocupada. Para qué va a estar cerrada si no hay nadie adentro, si es el símbolo universal de "ocupado". O sino algo están ocultado, ¿qué muerto dejaron ahí adentro que no lo quieren dejar salir? De hecho, si te dejaste un muertito ahí, mejor abrir la puerta y que se salga, porque sino el próximo que entre, desprevenido, luego de haber golpeado la puerta y haber esperado que nadie responda, se llevará de regalo una sorpresa asesina para las fosas nasales.

Déjelo salir amigo, que ahí adentro no tiene nada que hacer. Deje la puerta abierta, no deje lugar a dudas de ocupación del lugar, no sea molesto, ¿entiende? Y esto es un manifiesto universal, no apuntado a cierta persona en particular que está conviviendo transitoriamente con cierta otra persona en particular.

Los argentinos no tenemos memoria

Es un clásico, quejarse por las cosas del día a día como si fuese algo nuevo. Que el Gobierno no se preocupa por ellos, como si antes hubiese sido de otra manera, como si la oposición fuese a hacer algo al respecto y realmente le importe lo que vos pienses. Confiar para volver a ser traicionados. Olvidarnos del pasado, del valor de la historia.

Si le preguntan a un niño para que sirve la historia, probablemente responda algo así como "para conocer el pasado y no volver a repetir los errores en el futuro y para aprobar el secundario".

Hoy en día está pasando eso. Nos olvidamos del pasado, de la historia. Los argentinos no tenemos memoria y no paramos de quejarnos de lo que pasa como si fuese novedad.

La situación actual no tiene precedentes, llegar a este clima es una vergüenza a nivel nacional. Quejarnos de esto como si nunca antes lo hubiésemos vivido.

¿Acaso se olvidan lo que pasó en junio del año pasado?

También hacía un frío de re cagarse encima con caca en los pantalones. Con caca. Y ahora andamos por la calle diciendo "pero che! que frío hace, así no se puede estar". Pero lo mismo pasó el año pasado, y el anterior, y el otro. En invierno, hace frío, siempre.

Entonces déjense de joder y ponganse abrigo. Que hay que juntar fuerzas para en el verano empezar a decir frases como "pero che! que calor, así no se puede estar", o "el año pasado no hacía este calor, es culpa del calentamiento global y de la yegua esta, puta de mierda, hay que matarla a ella y a todos los que la rodean y después mear en sus tumbas".

Charlas de invierno

Finalmente parece que llegó el frío para quedarse, y con él un tópico de charlas insulsas e inocentes con gente con la que no tenés de que otra cosa hablar, y no digo únicamente en el ascensor.

Es común quejarse de que todo el mundo hable del frío como si fuese lo único que importa en la vida, pero yo creo que está bien. Son esas cosas que nos unen como argentinos. Eso y cuando juega la selección un mundial. Es de lo único que sabemos todos y podemos opinar con absoluto conocimiento de causa con cualquier persona que tengamos cerca, sea de la edad, raza, nivel intelectual, color de uñas o cantante latino favorito que sea.

Aguante el frío.