Acabo de recibir mi nuevo celular ya que hace poco perdí/me robaron/me hurtaron/me hicieron el cuento del Tio Pepito y sus lentejas mágicas con mi anterior aparato.
Después de una clásica y larga pelea con la companía telefónica que no voy a nombrar (pero que empieza con "Movi" y termina con "putos de mierda paren de dejarme colgado en el teléfono durante 15 minutos para después cortarme sin darme ninguna solución") ya tengo el nuevo teléfono, y más allá de tener que completar la agenda que es lo más tedioso de todo, me divierte configurar el aparato desde cero.
Lo mismo me pasa cuando cuando me formatean la compu o accedo a una nueva. Todo el asunto de bajarse los programas que usa uno, configurar los accesos directos, el fondo de pantalla, la barra de tareas, el menú inicio y eso me divierte mucho. Porque cada uno tiene sus preferencias, y más allá de lo denso que puede ser, es entretenido hacerlo de nuevo.
Revisando que traía el el teléfono y que cosas grandiosas puedo hacer (es un aparato sencillo), encontré en la carpeta de música el disco entero de Onda Vaga, y me pregunto si los nuevos chicos mimados del indie sabrán que Samsung y Movistar (ups, lo dije) están distribuyendo su material probablemente sin su autorización.
Obviamente lo primero que hice fue borrarlo e ir a comprar el disco por si me para la cana por la calle y me revisa el celu. No quiero terminar tras las rejas por llevar música ilegal encima. Menos mal que lo revisé a tiempo.
4 comentarios:
Seguro, no hay que bajar música. Ni pelis, ni mirar series online. No.
onda vaga me tiene un poco los huevos al plato.
Menos mal,Dios! no gano para sustos con usted.
Pobres, ellos que son tan chetos no deben saber que la prole escucha gratis sus canciones.
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