El último "Nos vemos"

Ya estoy en la víspera de la cirugía, llegó el momento de la verdad, el ahora o nunca, el bondi o taxi, el qué preferis, mostaza o mayonesa, el 5ta a fondo, el día de la marmota.

Cada vez me parece más raro, no caigo en como será ver sin anteojos, pero es lo de menos. La preocupación que me aqueja ahora es la culpa. No la judía ni nada de eso. Sino la de mis feligreses poco videntes.

Me siento como si fuese un pelado que se está por hacer uno de esos tratamientos que te injertan pelo por pelo. No es que vaya a ser un pelado con peluquín, esos vendrían a ser los que usan lentes de contacto. Sino uno que podría pasar desapercibido en el resto de la sociedad, que se presenta como un ser normal, común y corriente, trabajador, seguidor de fútbol (que lo ve desde casa, no en la cancha), y le gusta el vino y el queso. Hecho y derecho digamos. Pero los demás pelados van a saber tu secreto y te van a hacer a un lado.

Eso pasará con la gente que usa anteojos. Me van a dejar de respetar, voy a dejar de ser su dios (?). Pero todo para volverme un ser superior. Ahí el dilema.

Aún así, todo esto no importa. La operación se hace, no hay vuelta atrás (nunca la hay) y estoy contento por eso.

Esperemos que cuando termine todo, Alemanes en Short siga existiendo tal como nos gusta y no se vuelva un blog careta, que se usa de diario íntimo, para hablar de fútbol y de minas, medio gorila, anti k y que de tanto en tanto te recomienda recetas de cocina y videos de youtube.

Como cualquier blog de alguien que no usa anteojos.