Sábado de Mierda

El sábado, día tan especial para cientos y cientos de jóvenes repletos de acné, que consideran a esta parte de la semana como la clave para dejar atrás sus ideologías de niños y empezar a explorar el sexo opuesto. Claro que casi siempre con resultados fallidos. O siempre con resultados fallidos. O nunca me pude agarrar una mina cuando era un pendejo con acné.

Pero ahora todo cambió. Un sábado significa salir con amigos o con novia, ir a reventarla por ahí, descontrolar un poco por aquí, ver una pelí por alluá, alimentar guanacos en la Feria Nacional de Guanacos de Liniers, etc, etc.

Este sábado no tenía que trabajar, así que todo pintaba resplandecientementetente bien, como cualquier sábado que alguien no tiene que trabajar. Pero no.

Claro que no.

Me agarró el primer resfrío del año. Yo no me enfermo, nunca y de nada. Salvo resfríos y catarros. Me da mucha gracia llamarlos catarros. Pero bueno, me agarró uno y me quedé todo el día en casa. Tampoco tenía que ser tan terrible así que decidí ver dos películas para pasar el tiempo. El problema fue que las dos terminaron siendo una garcha.

Recientemente leí el libro La Guía del Autoestopista Galáctico, el cual súper recomiendo. Es una excelente mezcla de ciencia ficción, aventuras y mucho humor. Está muy bien escrito y es muy gracioso. También está la película, que fue una de las elegidas para hacer que mi sábado se parezca más a un domingo de mierda que a un sábado de mierda. Y después de verla, se terminó pareciendo a cuando te vas de vacaciones y te enfermás, así que te tenés que quedar en cama mientras todos tus amigos se van de joda y cuando vuelven te cuentan que conocieron a un contingente de yankíes re descontroladas que tenían bocha de guita para gastar y se las enfiestaron a todas. O algo así.

Bueno, en resumen, hicieron mierda un excelente libro con una película horrenda. En si, tiene una estética muy copada y es aaaalgo divertida, pero hicieron cualquiera con la historia original del libro. No es que faltaron cosas, sino que directamente la trama central de la película es totalmente diferente a la del libro. Inventaron historias que antes no existían, personajes que no había, y demás estupideces que no quiero nombrar porque no se me ocurre que más decir.

Pasaron las horas, dormí una siesta, me seguí sintiendo enfermo, así que llegó la hora de otra película. Previamente recomendada por Bort, quien me dijo que era algo así como la Belleza Americana 2, vi Revolutionary Road, la nueva película de Sam Mendes. Con Leonardo “La Negra” Di Capristo y Kate Winsislet, los mismos de la peli del barco que estaba embrujado y como todos los pasajeros tenían mal karma se termina hundiendo en el medio del atlántico y se mueren casi todos. Una lástima que no se hayan muerto de verdad.

Bueno, en resumen, otra garcha. Nada que ver con la increíble película que fue Belleza Americana, la cual me parece una de las mejores que vi en mi vida. Sobre todo desde que me enteré que gano Oscares. Porque si ganó Oscares es mucho mejor que si no lo hubiese hecho. Pero esta es una terrible cagada. Durante la primera hora no pasa una mierda. Después son treinta minutos que hay algo de gritos, violencia y sexo, pero no pasa nada. Y después termina.

Pero creo que lo que realmente me hizo odiarla fueron las dos escenas de sexo que tiene. Yo de sexo lo único que se es lo que vi en las revistas y los videos porno que tiene mi papá en su computadora, pero esos encuentros íntimos entre dos personas fueron simplemente patéticos. Uno fue en un auto y el otro en una cocina. Y te muestran como si por ponerte contra una mina y hacer como que te bajás el cierre, ya implica que podés coger. Y… ¡ay! ¡Que bronca! Ni siquiera muestran una teta ni nada porque siempre cogen vestidos. ¡Que bronca!


Bueno, en resumen. Lean libros y no vean películas. Lean La Guía del Autoestopista Galáctico que es genial. Es de Douglas Adams. Y esta otra pelí de mierda creo que está basada en un libro, el cual no pienso leer. Pero si ustedes quieren hacerlo, vayan y háganlo, pero por favor, no me cuenten que lo hicieron porque realmente no me interesa.



Esto se extendió demasiado. Les dejo un beso en la frente y otro en el lóbulo derecho. Que duerman bien.