lunes, 6 de octubre de 2008

El de la vieja y el conde

No se por qué, pero la gente asocia a los chocolates de buena calidad con imágenes de una abuelita simpática o a algún personaje de la nobleza europea. En lo posible que sean condes o príncipes.

A lo que me trae, nunca supe bien que es un conde. Tampoco se a donde es que fue a cagar. Lo que si sé, es que al parecer tenía hemorroides y le costaba una bocha ir al baño. Cada vez que tenía que cagar sufría una bocha y como en esa época no había avanzado mucho la medicina, tenían que sellarle el toto con la gotita para curarlo.

Así que la próxima vez que te pregunten "¿A donde?", acordate que todos podemos tener problemas en las pompis.

2 comentarios:

Pablo dijo...

hay que meterse la hemorroide para adentro con el dedo, cuesta pero es justo y necesario

Mariann dijo...

las palabras discriminan